En la localidad de Albatera, en la Vega Baja, solucionamos un problema que había en un edificio de ladrillo cara vista. Al ser una zona muy concurrida de la localidad, muchos canes pasaban por la zona y orinaban en la zona inferior de la fachada del edificio, originando manchas oscuras y estropeando el paramento, que absorbía la suciedad al ser muy poroso. Limpiamos la  suciedad existente con vapor a alta presión y posteriormente aplicamos la protección HLG System hasta la altura de los ventanales, dándole el característico «efecto mojado» a la fachada protegida. Ahora la propietaria de la vivienda no deberá preocuparse más por las micciones de los perros, ya que la protección aplicada es hidrófuga y totalmente inocua para los animales.