A veces, la imagen exterior de un edificio es deplorable debido a las grafitis que afean la fachada. Da una imagen de zona degradada, perdiendo las propiedades su valor real aunque estén en buena zona, como es este edificio del centro de Alicante.

Parte de la fachada de un edificio en la calle Maestro Marques era de piedra proyectada, un tipo de paramento que es muy bonito, pero muy difícil de limpiar, debido a que está compuesto por pequeñas piedras aglomeradas con cemento. Esto hace que aunque se limpie la parte superficial, las tintas de los sprays manchen también la parte interior de las piedras, haciendo imposible eliminar las sombras sin dañar la pared.

Así, la mejor solución esn este caso es repintar la pared y protegerla después para evitar nuevos problemas de grafiti. Una fina capa de cristal líquido evitará que nuevas pintadas se adhieran a la fachada, protegiéndola durante muchos años.